Mi lista de blogs

martes, 9 de julio de 2013

Democracia real (parte 2)


Si llegaste a leer Democracia real parte 1 donde cuestionaba algunas definiciones sobre democracia, seguramente ya habrías indagado más sobre estos conceptos. Una breve reseña creo que no esté mal. No pretendo ser rigurosamente estricto que para eso hay publicaciones especializadas.

La democracia no surgió por generación espontánea. A lo largo de la historia han habido pueblos que se han organizado de manera democrática, ¿sentirían que estaban entre iguales? De ser así no aceptarían a nadie por encima de ellos. Los primeros en acuñar este término fueron los griegos. Ya antes parece que hubo otros pueblos que empleaban ese tipo de gobierno. Sin embargo, los griegos, además de acuñar ese termino que significa que el poder reside en el pueblo, fue donde más tiempo y más importancia tomó (duraron más que las actuales democracias). No sé si alguna vez habéis oído hablar de ese pueblo. Estos antiguos griegos vivían en ciudades-estado (polis o ciudad-estado, territorio políticamente independiente formado por una ciudad, puede que con algunas aldeas, junto con el territorio propio), en parte de la costa del Mediterráneo Oriental principalmente y tenían una relativa importancia, muy relativa, como pueblo fronterizo del todo poderoso Imperio Persa. La Potencia cientifico-tecnológica-militar de la época.


Allá por el décimo siglo antes de Cristo, en Atenas, una de estas ciudades-estado, comenzó a desestabilizar su estructura, el Statu Quo, ya que un rey quiso reunir todo el poder entorno a su persona. Logró justo lo contrario, la aristocracia se reveló contra él y se estableció un gobierno oligárquico (todo el poder en manos de unos pocos) que regían sobre la ciudad y sus habitantes. Un gobierno formado sólo por poderosos, únicamente los que poseían el poder por herencia. Con el tiempo, se fue desgastando este poder ya que “el pueblo” exigía participación. Lo que llevaron a que una persona llamada Solón pensara en la timocracia como forma de tener a todos (hombres libres) dentro de la política y así contentos. Los cargos, papel en la política o puestos públicos venían dados por el honor, vamos la clase social. En pocas palabras “tanto tienes, tanto vales”. De esta forma a todos se le da un papel, pero los poderosos seguían ostentando el poder, pero ahora por su “honor”, cuanto más poder adquisitivo, “honor”, más poder o mejor cargo. ¡No podían quejarse de no participar en el gobierno del estado!

La avaricia de unos llevó a la perdida de poder de otros y este descontento propició la llegada de la tiranía. Esa tiranía lograba que un único poderoso lograra lo que aquel rey quisiera siglos antes, el poder absoluto de la ciudad. La tiranía, en un primer momento era bien visto por el pueblo pero todo esto se volvía, con el tiempo, en su contra. A veces se llegaba a la tiranía por aclamación popular y otras por apoyo de potencias extranjeras (como vemos, nada nuevo bajo el sol). El pueblo que ya sabía lo que era poder gobernar por sí mismo, ser parte del estado y gobierno produjo un gran malestar. Situación ésta, que cada vez ponía más tensa la gobernabilidad. Aunque fuera una mera ilusión, aquella responsabilidad pública, las clases más bajas y altas, ansiaban recobrarlo, la últimas buscaban recobrar la oligarquía. (2500 años después el panorama parece que sigue igual, muchos con intereses diversos pero con un objetivo común. Luego llegan las purgas... asesinatos).

Fue, Clístenes un ciudadano de familia poderosa, que había ostentado un alto cargo durante uno de los gobiernos tiránicos, el que en lugar de restablecer el poder anterior se decidió a realizar unas reformas democráticas. Entre otras redistribuyó la forma de organizarse. Se estructuraron grupos heterogéneos que nada tenían que ver con los anteriores, minimizando el poder de caciques y partidos territoriales. (puede que esto hubiera venido bien en la Segunda República Española para reducir el poder de los señoritos).

Pericles, “el primer ciudadano de Atenas”, fue un personaje polifacético y virtuoso. Defendió la democracia participativa, contra los conservadores que deseaban restaurar la oligarquía. Aunque tenía un lado oscuro, creo el imperio ateniense y su imperialismo negaba a otros pueblos la democracia (En la actualidad se nos han presentado a un personaje igual de virtuoso y con el mismo lado oscuro. Al de nuestra época le gustan las aves y lo mismo le da por una paloma, tendiendo más por las águilas. Últimamente le ha dado por los artificios, o ba mas” bien decir, por pájaros teledirijidos. Las cosas de los autoproclamados, paladines de las libertad).


La democracia ateniense era una democracia directa. Los hombres libres participaban en las decisiones que les afectaban y podían iniciar propuestas y juicios. Esta última frase tiene muchas ideas pero lo principal para poder participar en democracia es que se debía ser hombre. Las mujeres y los niños no tenían condición para ser ciudadanos libres, eran ciudadanos de segunda, siempre dependientes de un varón. La mujer era siempre considerada con una menor de edad. Por otra parte era primordial ser libres, con lo que no podían ser esclavos y mucho menos extranjeros. El número de habitantes de la ciudad con derecho a participar en los asuntos que les afectaban se reducía a un 10% aproximadamente. El 10% de la población de la ciudad era la que gobernaba, gracias a que eran HOMBRES LIBRES. ¿Qué diferencia había con la situación anterior, anterior a la tiranía? En la timocracia todos tenían algo que hacer o decir pero según ingresos. En la democracia “todos” los ciudadanos eran iguales y podían realizar las mismas funciones. La condición humana hizo que con el tiempo, los poderosos fueran acotando esta definición de hombre libre, de manera que cada vez se reducía más aún el porcentaje de voces con posibilidad de decisión. Hasta que los macedonios invadieron sus territorios. Aristocracia, Timocracia o Democracia no fue más, a mi modo de verlo, que una oligarquía en la que se fue ampliando o reduciendo el número que participantes. Esa democracia no fue universal, pero desde luego, es lo que más se acercaba.

¿Piensas que el 10% de la población de una ciudad o estado es poco para considerarla democracia? ¿Por qué no hacemos números con los actuales? España tiene unos 41.000.000 de habitantes de los que sólo unos 35.700.000 habitantes pueden decidir (como vimos en la Parte I, sólo decidir sobre la elección del gobierno y no sobre los asuntos que les afectan). Y este gobierno (números aproximado) está formado por:
· 68500 concejales
· 1200 diputados autonómicos
· 590 entre diputados y senadores
· 15.000, 17.000 o hasta 20,000 asesores en toda España

Aunque los asesores tengan una influencia directa sobre los políticos, su sueldo salga del erario público y suelan atender a intereses privados, no podemos contarlos en este computo ya que no los elegimos. ¿O sí deberíamos computarlos?

Los políticos, en su mayoría, tiene una dedicación exclusiva, con lo que me recuerda a aquellos hombres libres de Atenas. La democracia representativa nos lleva a que aproximadamente sólo suponga el 0,185% de la población. ¿Sigues pensando que vives en una democracia por votar cada cuatro años, si es que llegas a ejercer tu derecho a voto? Este porcentaje parece pequeño pero teniendo en cuenta la disciplina de voto y que la mayoría de las decisiones son tomadas en acuerdo con grandes empresas, lobbies, grupos de presión o “tanques de ideas” como algunas fundaciones, este porcentaje se reduce a un número tan pequeño que suena idílico ese 10% con capacidad de decisión. Según algunas noticias las decisiones, del planeta y no siendo conspiranoico, son tomadas por sólo 660 personas que controlan el mundo, a través de entramados financieros. Así que de unos 7.000.000.000 de habitantes que hay en el planeta esto sólo supone un ridículo 0.00001%. Unos pocos toman ciertas decisiones que el resto, ya sea por convicción, lealtad o más probablemente por ganarse un premio cual “azucarillo y palmadita en el lomo” de un animal de compañía, hace sin ser lo más mínimamente crítico. La mayoría ha asimilado los deseos del amo de forma que cree saber lo que desean los jefes y actúa sin preguntar. (Si se lía gorda ya tendrán, estos poderosos en el silencio, a un cabeza de turco).

La democracia ha servido para ganar la “primera fase de la guerra fría”. Sin el bloque Soviético no tenía sentido para ellos mantener ni el estado del bienestar ni la democracia. ¿Que hacen cuando tienen un objetivo claro? Se toman su tiempo, nos envenenan contra nosotros y todas aquellas instituciones a destruir son atacadas por nosotros mismos. Comienza la degeneración de la democracia. Manipulación de datos y la mala memoria que tenemos o selectiva ayuda.

La partitocracia (el poder real esta en manos de oligarcas de grandes partidos que se turnan en el gobierno), esas dotes oratorias apelando a la sabiduría popular y la inteligencia para convencer de que el oponente es lo peor para el bien común. Puede ser curioso y contradictorio aludir a la gran sabiduría del pueblo y a la vez asustar a ese mismo pueblo de caer en la Oclocracia (Gobierno de la muchedumbre. La tiranía de las mayorías incultas que obliga al gobernante ha tomar pésimas decisiones). Mostrándose, el gobernante, como los salvadores, protectores, qué digo, los tutores del pueblo ignorante, del populacho. Que el pueblo haga lo que sabe, que nosotros pondremos los medios para ello.

Como ya pasara en el mundo griego, se termina entrando en la Plutocracia (está presente una oligarquía de ricos que controlan el estado, o bien, influencia directamente sobre el gobierno), no hay que dar muchos rodeos, viendo la deriva de los gobiernos en los que prima más el interés de grandes fortunas que la del pueblo.

La sutileza actual hace que vivamos en una plutocracia, partitocracia y nos asusten con la caída en la oclocracia, si dejamos la falsa democracia representativa, si nos diese por cambiar a un modelo de democracia directa. ¿Te has planteado en qué modelo político vives o ya eres parte de esa muchedumbre que se ha creído lo de que cada uno “haga lo que sabe hacer”? En la actualidad se está cambiando el modelo social (¿todavía piensas que desean salir de la crisis y volver a los beneficios sociales y democráticos anteriores a la crisis?). Un cambio de sistema social a través del cambio de estructura mental y ésta se nos induce desde el poder con ese... “es inevitable”. Se nos lleva a una idea de estado en el que todo es inevitable, todo por nuestro bien, todo por nuestra seguridad, todo, todo, todo es para ellos y tu a hacer lo que sabes hacer. Es decir, pagar, delatar, llorar, temblar y dosis de euforia colectiva para aliviar la tensión. Unas élites iluminadas que controlan al resto de los mortales, haciéndoles creer que son libres. Estos poderosos que recurren a expresiones como “lo natural es...” para hacernos ver que en la naturaleza sobreviven los fuertes, luego no existe igualdad y por lo tanto, la democracia no es natural. Así que cabe preguntarse de nuevo: ¿vivimos en democracia actualmente? Es fácil culpar a otros, sin duda, esos “tutores” ya te habían dicho que tenías un problema y quién lo causaba. ¿Para que cuestionarlos? ¿no son de los tuyos? Luego, es imposible que vayan en tu contra. (Es una ironía).                                                                                                                                                                                                                Continuará...

7 comentarios:

  1. Muy interesante Víctor, pero tengo que hacerte una precisión: Aquí no tenemos democracia, tenemos un régimen en el que nos dejan votar cada cuatro años y el resto del tiempo manda la oligarquía.

    ResponderEliminar
  2. Querido Víctor, suena casi todo a una fina ironía.
    Sobre todo lo de "timocracia"..., por lo de timo.
    Lo que me hace deducir tu elaborado texto, es que nos encontramos frente a una selección antinatural de la especie.
    Me quedo con la Oclocracia (Gobierno de la muchedumbre. La tiranía de las mayorías incultas que obliga al gobernante ha tomar pésimas decisiones). Con una apreciación: ya se han encargado de que a golpe de decreto y supresión de derechos, nos hayamos puesto a devorar los textos de los que saben, los que aportan (desde nuestro lado), su punto de vista, a favor del pueblo. Y acoto: más incultos y más hambre, tenían nuestros patriotas franceses. Y mira dónde han llegado.
    Una buena Mme. Guillotine y lo conseguimos en España.
    Siguiendo con la ironía, me dan mucha pena los gobernantes que deciden nuestro futuro: Los tienen rodeados 20.000 asesores (algunos sin el menor conocimiento sobre lo que asesora). Y están en minoría.
    Pero si nosotros, el vulgo, nos movemos rápido y tomamos sus asientos, seremos capaces de decidir con poco margen de error en quien confiamos. Y pondríamos los medios de control para que no se equivoquen, ni se ilusionen con engañarnos: Es llevar la asamblea de la calle, al congreso y hacer tripas el senado, que es un coste innecesario. Y pedir cuentas. Nunca más, creer lo que nos digan. Como he dicho siempre: administrar con la cuenta de la vieja, que nunca se equivocaba.
    ¿Cuando empezamos?

    ResponderEliminar
  3. Víctor buena continuación del anterior y desde luego pienso que nunca hemos estado en una democracia. Hemos tenido una ensoñación, sobre todo los que vivimos el franquismo, que querímos a toda costa tener un sistema democrático y lo que hemos tenido ha sido un 'transición no transitada' Todo empezó con el 'atado y bien atado' que Franco con su atiplada voz impuso al Borbón. Por eso en mi opinión hay que cambiar el sistema desde abajo, no desde arriba como se hizo con la Constitución del 78.Necesitamos savia nueva y bien poreparada para asumir un cambio en que ya estamos inmersos.

    ResponderEliminar
  4. Sergio Lara Rocha desde Chile9 de julio de 2013, 8:24

    Victor, es un gusto leerte yo pienso que todo exeso es malo, si los ciudadanos dejamos todo en manos de los supuestamente representantes de los ciudadanos y no vigilamos su actuar, estamos hipotecando, el presente y el futuro de un Pais, tampoco se trata de reunirnos en grandes bloques de personas que quieran que el estado les proporcione todo,obligando a los gobiernos a tomar decisiones equivocadas, creo yo que debe haber un equilibrio entre quienes gobiernan y el pueblo, cuando los comunes y corrientes quieren cambios sociales y de reglas y quienes ostentan el gobierno quieren mantener el stato quo, lo que debiera suceder es que se tenga la voluntad, para informar el porque de impedir los cambios, los ciudadnos debemos estar al tanto de los ingresos que tiene un Pais y en que se gasta cada. Peso, Peseta, Dolar etc. etc y la unica forma en que esto se puede conseguir es educando y entregando la informacion abiertamente, la verdad y la unica forma que creo que es posible es participando activamente en politica , la politica es demasiado importante, para dejarla en manos de supuestos representantes de los ciudadanos, falta desde los ciudadnos discutir el tipo de Pais que queremos tener y lograr, te presentar'e un trabajo que estoy sacando adelante en aproximadamente. Un mes mas, que trata de este tema, particicpaci'on ciudadana desde la base y con herramientas para equiparar el poder , disculpa por favor los tildes fuera de lugar, teclado desconfigurado./

    ResponderEliminar
  5. Quizá antes de acuñar el término 'democracia' existiría tal forma de organizarse en algunos pueblos, pero la democracia, desde q los griegos la encorsetaron en el espejismo 'demos Kratos', ha sido siempre el tubo de escape para engañar y sedar al pueblo y así poder seguir gobernando los instaurados en clases pudientes.

    saludos :)

    ResponderEliminar
  6. Muy buena entrada. Creo que haces una especie de enumeración de pasos propios de la democracia, pero no me ha quedado muy claro. Comparto lo que dices. Muy bien documentado y expuesto. Enhorabuena. Un saludo, @adriantsn

    ResponderEliminar
  7. maravillosa entrega sobre la democracia a ver cuando te empiezas a creer que escribes genial

    ResponderEliminar